Todos los hombres del rey, la novela que convirtió a Robert Penn Warren en ganador del Premio Pullitzer, fue publicada en el año de 1946 y se ha convertido, con el paso del tiempo, en una lectura de referencia obligada para los amantes de la narrativa con tintes políticos.
Todos los hombres del rey: una crítica al populismo
Con una ambientación en los años 30, el autor logra dar una perspectiva muy amplia del clima social de la época. Aunque la crítica social es a veces muy sutil, Robert Penn Warren deja traslucir en Todos los hombres del rey algunas páginas el clima de desigualdad imperante especialmente enl proveniente de la segregación racial. Además, su visión de los defectos de la política de los Estados Unidos en la época y de la complejidad en las relaciones humanas, a veces trágica y a veces afortunada, han hecho que este libro se haya ganado la aprobación de la crítica y de los lectores por igual.
Aunque no está confirmado por el escritor, el personaje principal, Willie Talos, está basado en Huey Long, un político del partido demócrata que fue gobernador de Luisiana de 1928 a 1932. Huey Long fue especialmente conocido por sus ideales populistas. Dichas políticas le otorgaron el apoyo de las comunidades más pobres y olvidadas, al mismo tiempo que se enemistaba con las familias más adineradas de la sociedad.
Muy pronto esas ideas populistas generaron la desconfianza de los propios miembros del partido demócrata, quienes vieron en su forma de hacer política una peligrosa tendencia al radicalismo y a la demagogia y con posiciones que a veces circundaban la frontera del autoritarismo. Un tema este que, como los lectores podrán comprobar, sigue siendo de total actualidad y es fácil encontrar ejemplos de políticos similares en cualquier parte del mundo.
El argumento de Todos los hombres del rey
La historia comienza con Willie Talos (apodado el Jefe), un personaje fácilmente reconocible como el típico americano hecho a sí mismo, proveniente de una familia humilde, quien recién graduado de la carrera de Derecho a base de esfuerzos, es postulado por su partido como candidato a la presidencia de Luisiana. Al principio, su personalidad ingenua y soñadora lo lleva a preocuparse por el bien común. Sin embargo, con el paso del tiempo, se va dando cuenta que el mundo de la política está lleno de matices más bien oscuros, donde la moralidad está condicionada a un punto de vista muy subjetivo.
Es en este momento crucial, cuando Willie descubre que para poder ganar las elecciones deberá competir de acuerdo a las reglas de dicho juego, aunque para ello se vea obligado a subvertir sus propias convicciones, no tiene la menor duda en hacerlo sin un ápice de remordimiento. Willie Talos quiere dejar claro al mundo, y lo consigue, que en el campo de la política nadie juega mejor que él, y que si para llegar a cumplir su objetivo tiene que bordear la legralidad, e incluso sortearla o sobrepasarla, lo hará.
Así es como el protagonista de Todos los hombres del rey termina convirtiéndose en un astuto y sagaz oponente que logra el triunfo de manera inobjetable y siguiendo en todo momento las reglas no escritas que imperan en la política.
A lo largo del libro, encontraremos numerosas situaciones y juicios de moralidad, que van desde la persona intachable y firme en sus ideales, la de apariencia inocente, pero beneficiándose de las circunstancias, hasta aquel que actúa sin valores ni escrúpulos. Conforme la novela avanza, se muestran escenarios cada vez más degradantes en los que Willie Talos se ve envuelto.
Los personajes de Todos los hombres del rey
La historia de Todos los hombres del rey se presenta como una narración desde el futuro de los hechos presentes a cargo de Jack Burden, periodista y hombre de confianza del Jefe, cuya personalidad cínica y observadora logra contrastar las consecuencias de las decisiones de Willie con su propia vida y la forma en la que van afectando a quienes los rodean. De esta manera, se entretejen no solamente el ascenso y caída del personaje principal, sino que también se desarrollan múltiples historias en un mismo universo.
Nos encontraremos con la esposa de Talos, Lucy, la inteligente Sadie Burke, a los amigos de infancia de Jack, Adam y Anne Stanton, al juez Irwin, al Pequeño Duffy y a Sugar Boy. Todos ellos entrelazan sus destinos a través de las profundas reflexiones de Burden, que por momentos resultan altamente pesimistas.
Una narrativa sobresaliente
La narrativa que propone Robert Penn Warren en Todos los hombres del rey está llena de lirismo, con una detallada recreación de paisajes y de sentimientos que nos hace empatizar con los personajes y experimentar sus sentimientos como propios.
Por otro lado, nos presenta un discurso metaliterario en el que el narrador nos deja indicios y análisis personales de lo que va a suceder como piezas de un rompecabezas que va tomando forma conforme llegamos a la culminación de la historia. La combinación perfecta para poder cuajar una gran lectura como esta.
Existe una interesanteadaptación cinematográfica de esta novela. Se trata de El político (1949) de Robert Rossen, que resultó ganadora de varios premios Oscar, incluyendo el de mejor película. Un drama político que, pese al paso del tiempo, sigue dejándose ver y mantiene su vigencia.
Todos los hombres del rey. Robert Penn Warren. Anagrama.